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La European Fashion Alliance (EFA) ha celebrado en Bruselas su primer congreso, con el lema El estado de la moda europea. Un encuentro que reunió a líderes del sector, responsables políticos y otros agentes del ecosistema para debatir temas decisivos para el futuro de la moda en Europa. Durante el mismo, los asistentes pudieron conocer las primeras conclusiones de la encuesta impulsada por EFA para evaluar el estado actual de la industria e identificar retos y oportunidades significativos ante la inminente legislación en materia de sostenibilidad. Los resultados completos serán publicados en abril.

En su discurso de apertura, Scott Lipinski, presidente de EFA, subrayó: «Creamos la European Fashion Alliance porque existían muchas entidades regionales dedicadas al textil, pero no había ninguna organización que representase el lado creativo de la industria europea de la moda. Hacía falta una alianza con intereses compartidos que fomentara el intercambio de conocimiento en el sector y que tuviera como propósito crear un ecosistema europeo de la moda mejor”.

A continuación, Elke Timmerman, miembro de la Junta Directiva de la EFA, presentó los resultados del informe El estado de la moda europea. Según los participantes en la encuesta, las acciones clave que ayudarían a mejorar la imagen negativa que la sociedad europea tiene de la industria de la moda, pasarían por la educación de los consumidores, una regulación eficaz y armonizada, así como del impulso a los modelos de negocio sostenibles.

Otra de las conclusiones destacadas de la encuesta es que las pymes europeas no son plenamente conscientes ni están preparadas para la próxima normativa de la Unión Europea, a pesar de sus esfuerzos e inversiones realizadas para garantizar la durabilidad de los productos. En la mayoría de los casos, la falta de recursos impide la creación de puestos de directores de sostenibilidad o departamentos de responsabilidad social corporativa.

Las mesas redondas organizadas posteriormente sobre políticas sectoriales, educación e innovación, dirigidas por destacadas figuras de la industria de la moda, permitieron a los ponentes compartir sus puntos de vista y experiencias sobre cómo navegar por el cambiante panorama de la sostenibilidad.

El primer panel, moderado por Simone Cipriani, de la Alianza de las Naciones Unidas para la Moda Sostenible y fundador de la Iniciativa Moda Ética del ITC, se centró en las políticas comunitarias y contó con la participación de Guy Morgan, director de Sostenibilidad de Chanel; Henrik Vibskov, diseñador de moda; Ruth Reichstein, coordinadora de políticas del gabinete von der Leyen y presidenta de la Comisión Europea, y Julia Aruni Kirschner, directora de Impacto e Innovación de Armedangels.

El debate exploró la intersección de la política de sostenibilidad de la UE y el impacto de la legislación para las pymes, incluyendo ideas sobre el Pacto Verde Europeo, el Reglamento de Ecodiseño de Productos Sostenibles (ESPR), los pasaportes digitales de producto (DPP) y el impacto internacional de las decisiones de la UE. Guy Morgan señaló: «¿Cómo podemos garantizar que la sostenibilidad sea sencilla pero no simplista? Resulta realmente complicado cuando se considera la sostenibilidad holística de diferentes categorías de productos, todo el savoir faire, la artesanía y las miles de empresas y pymes que sostienen realmente esta industria”.

El segundo panel exploró el futuro de la formación y los sistemas educativos y su papel en la promoción de la sostenibilidad, así como la capacitación de jóvenes talentos y emprendedores. El debate estuvo moderado por Jasmien Wynants, cofundadora de Masjien, y contó con la participación de los expertos Dilys Williams, directora del Centro de Moda Sostenible; Paolo Naldini, director de la Fundación Cittadellarte, y Carlota Barrera, diseñadora de moda.

Para ésta última, “quizás nos hemos centrado demasiado en los materiales y debemos recordar y atender al aspecto social. Tenemos que reconocer y promover las artesanías locales a fin de armonizar el diseño contemporáneo con la tradición artesana. Además, es fundamental crear unas condiciones materiales de trabajo justas para que estos profesionales se consoliden, y es básico hacer llegar este discurso al público joven, para que las vean como profesiones buenas y reconocidas, así como para conseguir el relevo generacional en estas altas artesanías”.

El tercer panel se adentró en la transformación digital del sector con una mesa redonda sobre la transparencia de la cadena de suministro, los pasaportes digitales de productos (DPP), la digitalización y los modelos empresariales innovadores. La charla estuvo moderada por Christine Goulay, fundadora de Sustainabelle Advisory Services, y contó con la participación de Semora Mangnoesing, directora comercial de EON; Alexandre Capelli, director adjunto de medio ambiente de LVMH; Federico Brugnoli, fundador y director de Spin360, y la Dra. Andrée-Anne Lemieux, directora de la cátedra de sostenibilidad IFM-KERING y profesora titular del Institut Français de la Mode.

Alexandre Capelli se refirió al reto que supone la recopilación de datos: «Es un desafío tecnológico, pero también humano. Podemos tener la herramienta más eficaz y potente y aun así necesitamos formar e incentivar a los proveedores para que identifiquen y compartan las cifras correctas».

Además, el día culminó con una mesa redonda dirigida por miembros de la Junta Directiva de EFA, entre ellos Carlo Capasa, presidente de la Camera Nazionale della Moda Italiana; Caroline Rush, directora general del British Fashion Council; Pascal Morand, presidente ejecutivo de la Fédération de la Haute Couture et de la Mode; Elke Timmerman, relaciones internacionales y empresariales de Flanders DC; Scott Lipinski, director general del Fashion Council Germany y Zuzana Bobikova, directora general del Slovak Fashion Council.

«Apreciamos el camino emprendido por la Comisión Europea en materia de moda sostenible, pero pedimos algunos cambios legislativos para proteger y promover la moda creativa y sus valores, en línea con el compromiso de las marcas europeas de alto nivel. EFA ha abogado por ampliar la noción de durabilidad emocional relacionada con las prendas finales. Asimismo, EFA apoya la prohibición general de destruir los productos no vendidos, pero subraya la importancia de definir claramente los productos aptos para el consumo y la venta”, afirmó Carlo Capasa.

Para Caroline Rush«desde el punto de vista de las políticas, escuchamos más a las grandes empresas; por eso es tan importante que las pymes tengan un sitio en la mesa. Tienen que participar en las conversaciones para asegurarnos de que la legislación las protege. Son el corazón de la creatividad y de la cultura europea».

A este encuentro acudieron Araceli Díaz Santana, responsable del programa Gran Canaria Moda Cálida del cabildo de Gran Canaria; Sergio Álvarez, director de la Fundación Academia de la Moda Española, y Pepa Bueno, directora ejecutiva de la Asociación Creadores de Moda de España

Por su parte, Pascal Morand hizo hincapié en el gran reto que supone la obtención de datos y la medición de estos: “El reto de la información es crucial a todos los niveles: qué información recoger y cómo recogerla, lo que ilustra la importancia de la trazabilidad; cómo presentarla y comunicarla; cómo garantizar que la información es correcta. Como cualquier pasaporte, el DPP requiere control, para evitar la falsificación, así como información errónea e incorrecta».

A dicho encuentro acudieron Araceli Díaz Santana, responsable del programa Gran Canaria Moda Cálida del cabildo de Gran Canaria; Sergio Álvarez, director de la Fundación Academia de la Moda Española, y Pepa Bueno, directora ejecutiva de la Asociación Creadores de Moda de España, organismo que ha impulsado la creación de dicha alianza desde sus inicios.

A finales de abril EFA publicará en su web los resultados de la encuesta y un resumen del congreso.

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