La industria europea está atravesando tiempos turbulentos como consecuencia de la pandemia: el volumen de negocios en el sector de los textiles y la confección descendió entre un 10 y un 20%.
Sin embargo, quedan por delante desafíos aún mayores: serias interrupciones en las cadenas de suministro, el alza de los precios de la energía y las tendencias protectoras amenazan la competitividad de la industria.
Estrategia industrial de la UE
En ese contexto, la estrategia industrial de la UE revisada, presentada esta semana, está abordando cuestiones muy relevantes y subraya la necesidad de pensar detenidamente sobre la base industrial de Europa. Euratex da la bienvenida a la iniciativa, incluido el enfoque en 14 «ecosistemas» y la propuesta para desarrollar asociaciones privilegiadas con socios de confianza.
Al mismo tiempo, Euratex pide una mayor coherencia por parte de la UE en sus diferentes áreas políticas. Su director general, Dirk Vantyghem, comenta: “Celebramos el reconocimiento de que necesitamos una base industrial sólida en Europa, pero al mismo tiempo estamos luchando por mantener esa base, ya que nuestras empresas se enfrentan a importantes desafíos relacionados con el exceso de regulación y el aumento de los costes de suministro y energía. Se siente como una mano que te ofrece ayuda, mientras que la otra te aprieta fuerte”.
Establecer reglas globales
Mirando la perspectiva global, Euratex no está apelando a cerrar las fronteras europeas, ya que nuestro modelo industrial se basa en acceder a los mercados globales. “Pero claramente, existe la necesidad de establecer reglas globales para garantizar una competencia leal y asegurarse de que estas reglas se implementen y controlen adecuadamente. También la propuesta de abordar las distorsiones causadas por las subvenciones extranjeras en el mercado único debería ser acogida en este contexto”, subrayan.
Dirk Vantyghem concluye: “La industria europea de textiles y prendas de vestir atraviesa tiempos turbulentos. Hoy, como parte de esta nueva estrategia industrial de la UE, tenemos la oportunidad de construir un nuevo modelo de negocio, basado en la innovación, la calidad, la sostenibilidad y la equidad. Esperamos desarrollar esa nueva estrategia textil de la UE con todas las partes interesadas involucradas».