La próxima edición del certamen se llevará a cabo del 9 al 11 de octubre con 487 marcas de moda y estilo de vida en el Centro Nacional de Exposiciones y Convenciones de Shanghai. Una oferta que se estructurará en tres pabellones que comprenderán áreas de moda masculina, femenina, infantil, denim, calzado y bolsos, diseñadores (Impulses), accesorios y moda urbana.
En esta edición también ganará terreno la moda sostenible, ya que cada vez está más presente en la mente del consumidor chino, especialmente gracias a la pandemia. Conjuntamente con WGSN, el salón pondrá de relieve las tendencias en este ámbito para la primavera/verano 22.
Asimismo, el certamen también va a apostar por la digitalización, haciendo hincapié en las herramientas digitales y en las redes sociales para conectar a las marcas con los socios más idóneos. Y es que conviene subrayar que siete de cada diez consumidores chinos utiliza el comercio electrónico, pudiendo alcanzar el 83,5% en 2025, según el portal de estadísticas Statista.
Las ventas en el segmento de Moda ascenderán a unos 340.000 millones de euros en China este año, con unas ventas globales previstas de 777.781 millones de euros. China ofrece una expectativa de 5 billones de dólares durante la próxima década, según un informe del McKinsey Global Institute.