La Global Fashion Summit congregó en Copenhague el pasado mes de junio a más de mil actores clave de la industria textil y de la moda. Poniendo el foco en la necesidad de cambios urgentes y una acción decidida. Con una llamada enfática a la acción, el evento resaltó iniciativas tangibles, alianzas novedosas y propuestas legislativas.

«El tiempo es crítico y la acción es imperativa», esta fue la resonante sensación en la edición de este año de la Cumbre Global de la Moda en Copenhague. La urgencia climática y la necesidad de actuar en la industria textil fueron temas predominantes. La cumbre se convirtió en una plataforma para forjar alianzas y compromisos reales.

Política y legislación

La edición de junio 2023 destacó la importancia de la política en la moda y cómo está configurando una nueva era de responsabilidad y regulación. Desde comunicación sobre la sostenibilidad hasta legislación sobre residuos, la política se convirtió en un elemento clave en las discusiones. Se debatieron más de 16 propuestas legislativas a nivel de la Unión Europea, y figuras como Virginijus Sinkevičius, comisionado europeo para el Medio Ambiente, participaron activamente.

Innovación y cambio comportamental

Durante el Summit se puso el énfasis en la transparencia en la comunicación de la sostenibilidad, y en cómo las marcas pueden tomar la responsabilidad de crear un marco efectivo para comunicarse con los consumidores. Se exploró la narrativa adecuada para transformar las ideas radicales en realistas, enfatizando la necesidad de evitar prácticas irresponsables de greenwashing.

Se presentó la Global Textiles Policy Forum, buscando abordar los desafíos profundos de la sostenibilidad en la moda y crear un campo de juego nivelado en todo el sector textil. La cumbre también hizo espacio para reconocer la narrativa poderosa en torno a la compra responsable y el consumo sostenible.

La transición a una economía circular, el manejo responsable de los desechos textiles y la justicia climática fueron otros temas críticos. La inclusión de diferentes voces y representantes en la cadena de valor también fue una preocupación clave, destacando la necesidad de una inclusión genuina en la industria.

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La Cumbre Global de la Moda en Copenhague ha sido un catalizador para la acción y el cambio en la industria de la moda. la reunión ha marcado un hito en la urgencia y compromiso con la sostenibilidad. El mundo de la moda ahora espera con interés la próxima edición en Boston, donde se continuará construyendo sobre estos fundamentos cruciales.

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