El Informe de Impacto del COVID-19 en el sector de la Moda, publicado la pasada semana por el centro de estudios internacionales EY con el apoyo de las asociaciones sectoriales ModaEspaña y ANGED, reflejaba la contundente reducción en las ventas de moda durante éste año 2020, cayendo entre el 30 y el 45% respecto a la cifra del año 2019.
El mismo informe afirma que esa reducción de las ventas, con los márgenes actuales de sector, resulta inasumible para la inmensa mayoría de marcas y tiendas de moda que, sin ayuda por parte de arrendadores y administraciones, no podrán asumir los costes de los alquileres y se verán empujados al cierre.
Las asociaciones sectoriales envían un mensaje de auxilio al Gobierno y también a los propietarios de locales comerciales. Según David García, director ejecutivo del Clúster Catalán de la Moda (MODACC), “las marcas de proximidad y el pequeño y mediano comercio sólo podrán sobrevivir si el Gobierno regula la exención de las rentas de alquiler durante el período de alarma”.
Una vez se recupere la actividad comercial, sería momento para renegociar las condiciones de los contratos de alquiler con objeto de ajustar las rentas de los meses que restan del año 2020 al ritmo de la recuperación económica, según García.
El sentido de ésta medida es dar el oxígeno indispensable al sector para sobrevivir, repartiendo los esfuerzos de subsistencia entre propietarios de locales comerciales, marcas de moda y el propio Gobierno.
Si no se consigue este acuerdo el sector afirma no poder asumir los costes de desarrollo y producción de los productos, los recursos humanos de las empresas y las rentas de locales comerciales.
apremia al Gobierno a legislar con carácter de urgencia pensando en las pymes del sector de la Moda
Según García, “si se deja todo el peso sobre la espalda de las marcas y el comercio, los cierres de empresas de moda antes de final de año serán muy numerosos”.
David García afirma que la crisis COVID-19 nos confronta con el modelo comercial que queremos en un futuro inmediato: “Si queremos proteger nuestras marcas, los espacios comerciales de nuestras ciudades y el pequeño comercio de proximidad es momento de actuar” y apremia al Gobierno a legislar con carácter de urgencia pensando en las pymes del sector de la Moda.