Hohenstein, especialista en investigación y pruebas textiles, tiene motivos para celebrar: este año se cumple el 75 aniversario de la empresa. En su tercera generación, la compañía pasará este año histórico ampliando sus cimientos para el futuro. El propietario, el Dr. Stefan Mecheels, afirma: «Nuestro lema, Vivimos los textiles, expresa exactamente lo que nos ha hecho especiales durante muchas décadas: nuestro entusiasmo colectivo por el textil y la oportunidad de brindar soluciones que marquen la diferencia».

El Prof. Dr.-Ing. Otto Mecheels sentó las bases de una empresa de renombre internacional en 1946 cuando fundó Instituto Hohenstein, una escuela textil en el castillo de Hohenstein. Su hijo, el Prof. Dr. Jürgen Mecheels modernizó las estructuras comerciales del Grupo Hohenstein y se expandió a nuevas áreas de investigación y servicio, como el acabado textil o las lavanderías / tintorerías profesionales.

Ayudó a cambiar para siempre la seguridad textil con el sistema de certificación Standard 100 by Oeko-Tex, que protege a los consumidores de sustancias nocivas. Bajo el liderazgo del Prof. Dr. Stefan Mecheels desde 1995, Hohenstein ha estado a la vanguardia del análisis de microfibras, perfeccionando constantemente sus estándares creados para pruebas de comodidad y compresión y trabajando para reducir el impacto ecológico de la industria.

Entre sus últimos hitos, cabe destacar el laboratorio de pruebas en Hong Kong, que ha estado en funcionamiento desde 2011, y los laboratorios de pruebas textiles de Hohenstein en Bangladesh e India, que se abrieron en 2018, para garantizar una proximidad aún mayor al mercado.

Soluciones para una industria textil global

Hoy en día, Hohenstein se especializa en la prueba, certificación e investigación de todo tipo de productos relacionados con los textiles. Con un total de más de 1.000 empleados en su sede en Bönnigheim y en más de 40 sucursales, oficinas de contacto y laboratorios en todo el mundo, la empresa se enfrenta a los desafíos actuales de la industria global.

«La sostenibilidad textil sigue siendo un enfoque importante para nosotros y está entretejida a través de cada decisión que tomamos», explica Stefan Mecheels. “Incluso los servicios que aparentemente están enfocados en la innovación contribuyen de alguna manera a productos más duraderos, menos desperdicio y más seguridad. Nuestro laboratorio de ajuste digital ayuda a las marcas a avanzar en el desarrollo de prendas de vestir digitalizadas. Utilizando tecnologías modernas en 3D y 4D y nuestra experiencia en patrones, ayudamos a nuestros clientes a diseñar prendas que se ajusten mejor con menos prototipos y menos desperdicio».

Cuando apareció el SARS-CoV-2, la compañía desarrolló una etiqueta de calidad para identificar fácilmente las máscaras comunitarias no médicas que cumplen con los requisitos legales y funcionales. Las etiquetas de calidad de Hohenstein son una prueba independiente con un alto nivel de credibilidad entre compradores y consumidores.

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