Logisfashion nace en octubre de 1996 gracias a un proyecto que Juan Martínez, Carlos Villa y Juan Manzanedo presentaron en el IESE, como punto y final de un MBA. Después de dos décadas, la empresa cuenta con un equipo de más de 500 profesionales en 12 centros logísticos. Estos centros, equipados para la manipulación y distribución textil, están ubicados en España, Chile, México, Colombia, Panamá, Miami, Vietnam y China, y suman más de 132.000 metros cuadrados de superficie.
Logisfashion comenzó a funcionar en octubre de 1996. ¿Cómo era la logística textil en aquellos tiempos y cómo es ahora?
Logisfashion fue pionero en ofrecer servicios de logística especializados en el sector fashion. En esa época, los operadores logísticos eran fundamentalmente transportistas con almacenes, que veían la logística como una extensión de su negocio de camiones. Su expertise era bajo y carecían de tecnología; por supuesto, no contaban con especialización alguna ya que se dedicaban a ofrecer servicios a sus clientes de transporte pensando que el margen estaba en la logística y no en el transporte. Desde la irrupción de Logisfashion quedó clara la importancia de la especialización y creo que fuimos capaces de demostrar que el transporte y el manejo de almacenes son negocios muy diferentes; de hecho, las grandes empresas multinacionales tienen ambos negocios en divisiones completamente independientes.
Externalizar la logística es una decisión estratégica dentro de una compañía, y por tanto, muy difícil de tomar. ¿Cree que en la actualidad las empresas están dispuestas a dar ese paso?
Por supuesto que sí; es cierto que no es una decisión fácil ya que hay que encontrar el partner adecuado, especialmente en un sector tan especial como el fashion. Sin embargo, las empresas se dan cuenta de cuál es su expertise, de dónde obtienen sus ventajas competitivas (en el diseño y la venta) y que hay determinadas operaciones que, si bien no te harán vender más, si las haces mal te puedes cargar el negocio. Por eso es mucho más eficiente aquello de “zapatero a tus zapatos” y dejar la logística en manos de especialistas, dedicándote tú a aquellas competencias que te diferenciarán en el mercado. ¿Qué sentido tiene invertir en almacenes cuando otro lo puede hacer por ti dedicando tus recursos a, por ejemplo, abrir tiendas o desarrollo de la marca?
¿Cuáles son las ventajas y desventajas de externalizar la logística?
La ventaja fundamental es poder dedicar el 100% de los recursos humanos y financieros de la empresa a aquello que te hará ser mejor que tu competencia y por tanto vender más. Adicionalmente te permite convertir costes fijos (almacenes y personal) en variables (coste por prenda) en un negocio tan estacional como el de la moda. Finalmente, si el partner es el adecuado, la especialización y las economías de escala deberían redundar en un mejor precio y servicio.
Las desventajas vienen muy de la mano de si te equivocas a la hora de elegir el partner: una buena logística no te hace vender más pero una mala logística te puede hundir el negocio. Hay empresas que consideran (desde mi punto de vista erróneamente) que solo ellos tienen la capacidad y flexibilidad suficiente para gestionar su logística y que hacerlo fuera ha de ser más económico. Creo que estas empresas no entienden la base de su negocio y dónde han de invertir realmente sus recursos.
Según la página web de Logisfashion, la compañía tiene filiales en México, China, Colombia, Vietnam y Miami. ¿Que pasa con Chile y Panamá?
En ambos países estamos presentes: en Panamá hemos empezado a operar en 2015 con un almacén en la Zona Libre de Colón (muy interesante pues permite consolidar producto de diferentes orígenes y, desde allí, redistribuir a los países del área sin tener que adelantar aranceles ni IVA al ser Zona Franca). Creemos que tiene un gran potencial y hemos empezado a operar, entre otros, con la multinacional danesa Bestseller.
En Chile somos socios de una compañía (Logistex) que opera desde 2005. Estamos muy cerca de cerrar un gran proyecto que nos permitirá instalarnos con una nave de 10.000 metros cuadrados en Santiago.
¿Ofrecen los mismo servicios en todas las filiales? O, por decirlo de una manera, ¿Qué servicios ofrecen en China y cuáles en Colombia?
Nuestra internacionalización empezó en 2005 y se asentó en dos grandes áreas: por un lado los países productores de Asia donde acompañamos a nuestros clientes aguas arriba en la cadena de suministro con operaciones de gestión de la producción, control de calidad, consolidación y servicios de valor añadido y, finalmente, pick and pack y transporte para los diferentes destinos. Así contamos con almacenes en el área de Shanghái, Shenzhen, Hong Kong y Vietnam; por otro lado vimos LATAM como el destino natural de las exportaciones europeas, por lo que realizamos operaciones similares a las que hacemos en España: acondicionamiento de prendas, gestión de stocks y transporte al cliente final. En LATAM trabajamos tanto con clientes extranjeros que venden en estos países como con marcas locales.
¿Cuánto facturó Logisfashion en 2015, y de esta cifra, cuánta aporta cada una de las filiales?
En 2015, cerramos con una facturación de 20 millones de euros, de los cuales, 14 provienen de España y 6 de las filiales. Eso supuso un crecimiento del 50 % respecto a 2014. En 2016 cerraremos por encima de los 25 millones de euros, con un objetivo de 50 millones en 2020.
Debido a la crisis, muchas empresas se vieron en la obligación de reducir los márgenes. ¿Ese fue el caso de Logisfashion? Y si es así, ¿qué hacer para ir recuperando dichos márgenes?
Gracias a la especialización, no debemos de entrar en guerras de precios como ha sido la nota habitual en el sector. Los servicios de calidad especializados tienen un precio que el cliente está dispuesto a pagar y nos permite tener unos márgenes adecuados que reinvertimos en tecnología y formación en un porcentaje elevado.
El e-commerce nos ha permitido mantener los niveles de crecimiento
La eclosión del e-commerce ha cambiado por completo el mapa de la distribución. ¿Cómo ha transformado la logística?
Nosotros ya vimos hace 5 años por dónde iban los tiros y la apuesta por el e-commerce nos ha permitido mantener los niveles de crecimiento, hasta el punto de que el 50 % de nuestras ventas en España proceden del e-commerce. Gracias a que estamos acostumbrados a un tipo de logística muy a la unidad y al ser una empresa muy flexible, nos fue fácil adoptar nuestros sistemas y procesos a la logística online que es muy diferente a la tradicional (poca profundidad de stock, necesidad de gran precisión, pedidos de 1 o 2 unidades, plazos de entrega superurgentes…). Creemos que el aumento de las ventas online en LATAM será otro factor importante de crecimiento para la compañía.
Logisfashion tiene en Girona un almacén dedicado a e-commerce. ¿Se trata solo de e-commerce textil o ya involucra a oto tipo de sectores?
Nuestra especialización es el fashion y el e-commerce; claro que tenemos clientes fashion que les hacemos la logística online, pero vendemos especialización en servicios logísticos para ventas por internet, lo que nos permite trabajar con clientes de muy diferentes sectores, eso sí, siempre complementarios con la moda.
Dada la evolución del e-commerce, ¿tienen previsto montar otro almacén dedicado a este tipo de logística?
No pretendemos que los almacenes estén dedicados al e-commerce o al retail, ya que mezclar ambas divisiones nos permite jugar con la estacionalidad (los momentos punta del e-commerce, como son Navidad o Black Friday, no coinciden con las temporadas tradicionales de la moda).
¿Qué es lo más complicado de la logística e-commerce?
La preparación de pedidos, que es muy difícil de automatizar y de prever. Adicionalmente, el stock tiene poca profundidad y es necesario que sea muy preciso, pues una prenda que falte es un cliente insatisfecho. Finalmente los plazos de entrega son muy ajustados. Además, los sistemas informáticos tienen que ser precisos, seguros y flexibles para estar conectado con el market place del cliente. Es una operación, en definitiva, muy tensa, donde nada puede fallar.
Centrándonos en el tema exclusivamente del textil, últimamente se viene hablando de un regreso de la producción a proximidad. ¿Cree que se está produciendo esta relocalización?
Sí que se está produciendo aunque no creo que afecte demasiado a España; países como Portugal, Marruecos o Rumanía están reactivando parte de su industria textil que se fue a Asia en los años 90. Eso sí, creo que los básicos y las grandes tiradas seguirán produciéndose en Asia.
En la actualidad, ¿cuáles son los primeros centros mundiales de producción textil?
China sigue siendo el numero uno por mucho que se haya deslocalizado parte de la producción; luego le siguen otros países como Vietnam, India, Camboya… Como decía antes, en proximidad Turquía, Rumanía, Marruecos y Portugal.
¿Cuáles son los principales proyectos de Logisfashion para 2016 y 2017?
El crecimiento lo tenemos enfocado en el desarrollo de los proyectos en marcha (Colombia, Panamá, Chile, Vietnam…) y, por supuesto, EEUU, que en 2020 ha de ser nuestro segundo mercado y que estamos en fase de desarrollar la estrategia que utilizaremos. Para ello hemos creado la posición de Dirección Comercial LATAM basada en el área de Nueva York.