El decreto del Estado de alarma obligó a bajar la persiana de los establecimientos de todos los segmentos de actividad de nuestro sector…y empujó a muchas empresas a abrir la puerta a los Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE). En esta mesa redonda hemos dado voz a empresas, asociaciones y organismos para que nos expliquen la idoneidad (o no) de esta medida y sus consecuencias a corto/medio plazo.
1Lores Segura
CEO de Asepri
CEO de Asepri
En su opinión, ¿es una buena medida la puesta en marcha de los ERTE? ¿Son la solución más eficaz para responder a la crisis actual?
La situación actual es de máxima incertidumbre y afecta a nivel mundial, no hay patrones establecidos, por lo que las empresas necesitan disponer de la mayor flexibilidad posible para ir adaptándose a las nuevas circunstancias según van surgiendo.
Ante un entorno nuevo y cambiante no podemos afirmar actualmente cuál es la medida más eficaz, pero sí podemos decir que los ERTES aportan flexibilidad y protegen al trabajador por lo que sí los consideramos una solución eficaz.
Las otras medidas adoptadas por las administraciones municipales, autonómicas y estatales, ¿son las más adecuadas para hacer frente a la situación laboral y económica?
Las Administraciones Públicas intentan solucionar la actual situación a través de diferentes medidas que son adecuadas, pero no suficientes. Por ello, ASEPRI ha lanzado al Gobierno de España, Comunidades Autónomas y Corporaciones Locales un bloque de solicitudes con medidas específicas para el sector de productos infantiles con el fin de acelerar la vuelta a la normalidad laboral y económica e impulsar la reconstrucción de nuestro tejido industrial.
Nuestra propuesta engloba las siguientes medidas de actuación:
- estimular la demanda del consumo nacional en el pequeño comercio con una gran campaña dirigida al consumidor final;
- ayudas a la natalidad como el cheque-bebé entre otros;
- aplicación de un IVA reducido en artículos infantiles cómo sucede en países europeos como Portugal, Irlanda, República Checa, entre otros;
- aplazar de forma excepcional las rebajas al mes de agosto;
- fomentar y flexibilizar la internacionalización;
- apoyo al pequeño comercio para adaptación de sus establecimientos a las normativas de seguridad y sanidad Covid19;
- apoyo en reindustrialización para deslocalizar progresivamente la producción, ganar en tejido industrial e independencia y generar más puestos de trabajo nacional;
- reconocimiento de artículos de puericultura como “productos esenciales”.
La actual situación ha puesto “patas arriba” casi todo. ¿Cómo cree que será el textil español y europeo, después de esta tormenta perfecta?
Tengo mucha confianza en que el textil español y europeo DESPIERTE. En este sentido, todos los apoyos de reindustrialización que pueda ofrecer Europa a todo el sector son de máxima importancia.
A qué teme más en la etapa post: ¿crisis de los mercados de exportación? ¿crisis del mercado doméstico? ¿a una oleada de impagos? ¿a encontrar una nueva generación de proveedores? ¿a la inutilidad – demostrada con suficiencia- de toda la clase política?
Sinceramente temo a casi TODO. Pero voy a priorizar y detallar:
Oleada de Impagos y espero que nos proteja el Gobierno
Situación del mercado doméstico: insisto que nuestro Gobierno debe realizar una Gran Campaña de consumo de producto español, consumo en España, comercio de cercanía y que llegue a todo el mundo desde el minuto 1, antes que reabran las tiendas. En el verano del 2020 posponer las rebajas al 15 de agosto y estudiar un nuevo modelo para el 2021: control de ofertas y promociones y fijar un nuevo periodo de rebajas de invierno y verano.
Mercados Exportación: Asepri asesorará a sus asociados aquellos mercados que ofrezcan más garantías a corto y medio plazo.
Clase política: Espero que todos los partidos que nos representan hayan aprendido una buena lección: ante esta crisis tan grave que estamos viviendo a nivel mundial es imprescindible que la clase política en España esté unida y sea solidaria con el conjunto de la sociedad española y que vele por este maravilloso país, que no nos defraude. Algunos países son un verdadero ejemplo, como Portugal, y son nuestros vecinos.
Menciono también a otros países que han sabido gestionar muy bien la Covid 19 como Alemania, Islandia, Finlandia y Nueva Zelanda, entre otros.
Algunos expertos señalan que la crisis actual va a ser corta. ¿Comparte usted esta opinión o, por el contrario, prevé una salida lenta y difícil hacia la recuperación?
Mi opinión es que la salida va a ser lenta y que las empresas van a necesitar un periodo mínimo de 12 meses de adaptación.
En líneas generales en el sector confección y calzado infantil prácticamente estamos hablando de un” 2020 en blanco”.
Asepri ha recomendado a sus fabricantes/distribuidores asociados de:
Colección inverno 20-21’
Minimizar el stock. Pueden llegar cancelaciones de la colección de invierno próxima a servir, por lo que hay que ser muy cautos a la hora de fabricar, fabricar lo justo.
Colección Verano 21
La empresa decidirá si desea participar en ferias que mantengan su celebración. Las tiendas muy afectadas por el cierre de comercio minorista, con stock disponible, serán muy cautelosas a la hora de hacer nuevos pedidos. Realizar una colección muy centrada que facilite la posterior fabricación y minimice el máximo stock. El consumo, tras el periodo de alerta, va a ser muy comedido. Hasta que las familias normalicen la situación, su prioridad será cubrir las necesidades básicas.
¿Cree que las empresas van a recuperar a posteriori toda la plantilla o con esta excusa se procederá a una reducción, más o menos encubierta, de su personal?
La recuperación de las plantillas e incluso la supervivencia de la propia empresa dependerá de los tiempos de recuperación de la actividad económica y de las nuevas medidas que el Gobierno ponga en marcha para minimizar la destrucción de empleo. Estamos ante una situación excepcional en la que es vital la actuación del Estado que debe dar una respuesta rápida y eficiente aprobando las medidas solicitadas por los distintos sectores cuyo objetivo es impulsar y acelerar el retorno a la normalidad de la industria y del comercio. La velocidad de la recuperación va a ser un factor determinante para que las empresas puedan mantener sus plantillas actuales.
Para concluir, láncenos, si lo ve factible, un mensaje optimista.
Saldremos adelante, claro que sí, somos un país guerrero, luchador y con una capacidad increíble de adaptarnos a las nuevas situaciones, en comparación con otros países europeos.
El sector español de “productos para la infancia” es líder a nivel mundial junto a Italia y Francia. La moda infantil y la puericultura española destaca por ofrecer un producto con una excelente relación diseño- calidad- precio; además, nuestras colecciones son seguras, cumplen con todas las normativas más exigentes en la C. europea.
Será imprescindible mejorar nuestro canal on line, b2b y b2c.
En España, a nuestros clientes tiendas (físicas multimarca de moda, calzado infantil y tiendas especializadas de puericultura) deberemos ofrecer todas las herramientas que estén a nuestro alcance y también solicitaremos al Gobierno apoyo para los minoristas.
A nivel internacional necesitaremos priorizar aquellos mercados, quizás mas lejanos, que nos ofrezcan más oportunidad de crecer. Es el momento de compartir, ser más trasversales.
Y a seguir luchando con optimismo…
2Carlos Martínez
Presidente de IMF Institución Académica (IMF Business School)
Presidente de IMF Institución Académica (IMF Business School)
En su opinión, ¿es una buena medida la puesta en marcha de los ERTE? ¿Son la solución más eficaz para responder a la crisis actual?
Las otras medidas adoptadas por las administraciones municipales, autonómicas y estatales, ¿son las más adecuadas para hacer frente a la situación laboral y económica?
Los llamados Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTEs) son una modalidad de expediente recogida en el artículo 47 de nuestro Estatuto de los Trabajadores.
Se trata de una suspensión con carácter temporal de los contratos, un parón de la relación laboral entre empresa y empleado que se establece por un plazo de tiempo determinado y que las compañías adoptan por razones económicas, organizativas o de producción.
O bien por causas de fuerza mayor, como es el caso y como el Gobierno ha dictaminado que se reconozcan en esta crisis. Y se están multiplicando en los últimos días, por lo que quiero expresar mi opinión para asesorar a empresas y empleados.
En el actual Estado de alarma decretado por el Ejecutivo, los ERTEs son posiblemente una de las soluciones de más rápido impacto para garantizar la supervivencia de muchos de los negocios afectados.
Pero, ojo, solo se deben aplicar en aquellos casos en los que la supervivencia del negocio esté real y efectivamente afectada y en peligro. En este sentido, será fundamental la vigilancia y el seguimiento de las autoridades laborales con el objetivo de evitar posibles casos de picaresca.
Lo que me gustaría también es pedirle al Gobierno que, una vez que la situación remonte, lleve a cabo un conjunto de medidas que garanticen un impulso del consumo con el objetivo de recuperar lo más rápidamente los niveles de actividad previos a la declaración de alarma nacional.
Es fundamental para poder salir de la posible crisis, laboral y económica, a la que nos enfrentaremos.
La actual situación ha puesto “patas arriba” casi todo. ¿Cómo cree que será el textil español y europeo, después de esta tormenta perfecta?
Por un lado, se abrirá una oportunidad para capitalizar las fortalezas estructurales de nuestro sector (diseño, creatividad, calidad de materiales…) pero por otro lado será necesario revisar toda la cadena de valor y procesos para optimizar los recursos y ajustar al máximo márgenes.
También se abre la oportunidad de establecer alianzas estratégicas que nos permitan entrar/reforzar nuestra presencia en determinadas geografías.
A qué teme más en la etapa post: ¿crisis de los mercados de exportación? ¿crisis del mercado doméstico? ¿a una oleada de impagos? ¿a encontrar una nueva generación de proveedores? ¿a la inutilidad – demostrada con suficiencia- de toda la clase política?
Será fundamental el conjunto de medidas que se aprueben para favorecer la reactivación del consumo así como la identificación de mercados alternativos de materias primas y mano de obra que nos permita disminuir la enorme dependencia de Asia.
Algunos expertos señalan que la crisis actual va a ser corta. ¿Comparte usted esta opinión o, por el contrario, prevé una salida lenta y difícil hacia la recuperación?
Dependerá de la duración definitiva del estado de alarma y de la idoneidad de las medidas económicas puestas en marcha por el Gobierno y por Europa.
¿Cree que las empresas van a recuperar a posteriori toda la plantilla o con esta excusa se procederá a una reducción, más o menos encubierta, de su personal?
La recuperación total de la plantilla dependerá directamente del grado de reactivación de la economía, recuperación de la demanda y políticas expansivas de concesión de crédito.
Para concluir, láncenos, si lo ve factible, un mensaje optimista.
Como en todas las crisis, aparecen oportunidades relacionadas con la reorganización de procesos, con el replanteamiento de modelos de negocio, con las áreas de I+D+i y con la búsqueda de nuevos proveedores (materias primas, mano de obra…) que disminuyan la enorme dependencia y concentración actual de ciertas economías.
3Jorge Taboadela
Director general de CMT Spain
Director general de CMT Spain
En su opinión, ¿es una buena medida la puesta en marcha de los ERTE? ¿Son la solución más eficaz para responder a la crisis actual?
El ERTE y la reducción temporal de trabajo (reducción de horas) es una de las herramientas (gracias a la ley actual que quería, por cierto, cambiar el Gobierno actual) Qué hubiese pasado si la hubiesen derogado o cambiado, no quiero ni imaginar.
Aún así no se podrá despedir en seis meses. Entonces en seis meses pagaremos impuestos y las empresas no viables echarán no sólo al que ha entrado en el ERTE o RTT si no también al resto. Dentro de seis meses a un año empresas cerradas y paro extratosférico. Se creen que protejen el empleo y lo único que hacen es provocar paro.
Por otro lado si las empresas no tienen ingresos, lo que hay que hacer es ayudar a reducir gastos; por lo tanto, los pagos de impuestos se deben derogar o retrasar el pago.
Quieren poner líneas de financiación para pagar, pero también pagar impuestos. Que den lineas de finaciación para mantener puestos de trabajo y estructura de la empresa, no pagar impuestos.
Con estas medidas sólo contienen el desastre 6 meses o menos si la empresa no aguanta.
La actual situación ha puesto “patas arriba” casi todo. ¿Cómo cree que será el textil español y europeo, después de esta tormenta perfecta?
- Menor consumo a corto/medio plazo. Ya no estabamos de moda, la moda es contaminante, despilfarradora…va contra el paradigma actual, teníamos que cambiar. Esto ayudará a acelerarlo pero con un alto precio de desapariciones en toda la cadena.
- Cierre de las empresas de producción y distribución que no aguanten la crisis. Reducción del número de actores en un año dentro de nuestro sector, tanto en la industria de materias primas, confección y marcas de distribución.
- Las que aguanten se reordenarán, cambio en la distribución, nichos de consumo, calidades y precios.
- Reducción del riesgo empresarial. Proveedores de proximidad, menos cantidades, más calidad, más responsabilidad corporativa…
- Nuevas oprtunidades a otros actores más flexibles y acorde con la demanda Post Covid’19 junto a las nuevas exigencias que ya había en RSC.
A qué teme más en la etapa post: ¿crisis de los mercados de exportación? ¿crisis del mercado doméstico? ¿a una oleada de impagos? ¿a encontrar una nueva generación de proveedores? ¿a la inutilidad – demostrada con suficiencia- de toda la clase política? Algunos expertos señalan que la crisis actual va a ser corta. ¿Comparte usted esta opinión o, por el contrario, prevé una salida lenta y difícil hacia la recuperación?
Salida en U tipo logo de NIKE, poco a poco;o tipo L a largo plazo más de 3-5 años para volver a crecer.
¿Cree que las empresas van a recuperar a posteriori toda la plantilla o con esta excusa se procederá a una reducción, más o menos encubierta, de su personal?
De excusa o encubierto nada. La mayoría de los empresarios son honrados y sostienen el 60% de los impuestos de los estados y naciones. No pontifiquemos ni marquemos a los empresarios como los malos. Trabajadores malos, sindicatos egoistas y paniaguados de los presupuestos pagados con nuestros impuestos y los políticos jetas… no, no seamos maniqueos. O nos sacrificamos todos y somos todos partícipes o la recuperación será aún más larga y difícil (evidentemente “free riders”, gorrones, parásitos habrá siempre).
No conozco a ningún empresario que eche gente y menos a los buenos trabajadores para disminuir su eficiencia empresarial y por tanto beneficio potencial. Si se le echa es por aumentar la eficiéncia y, si no, pues te haces ONG o sin ánimo de lucro. Siempre que sea dentro de la ley. No estamos discutiendo si es justo o injusto, moral o inmoral.
Para concluir, láncenos, si lo ve factible, un mensaje optimista.
La civilización ha llegado a un punto de inflexión. Después de un periodo duro y difícil de reorganización, social, económico, cultural, político… volveremos a la senda de la evolución y progreso de la humanidad. Con un paradigma quizás menos nihilista. Somos unos privilegiados por vivir este período histórico.
4Ángel Asensio
Presidente de ASECOM, FEDECON y la Confederación ModaEspaña
Presidente de ASECOM, FEDECON y la Confederación ModaEspaña
En su opinión, ¿es una buena medida la puesta en marcha de los ERTE? ¿Son la solución más eficaz para responder a la crisis actual?
En el contexto en el que estamos de confinamiento, y debido a la inactividad del sector, los ERTEs son una herramienta fundamental y debe ponerse en práctica de forma urgente, sino vamos a tener un problema con las empresas.
Es necesario flexibilizar los ERTEs para que las empresas puedan asumir los costes generados por la crisis económica, derivada de la pandemia, y que los trabajadores puedan empezar a cobrar lo antes posible.
En cualquier caso, los ERTEs deben presentarse de manera transitoria y como medio para evitar el desempleo. Según vaya evolucionando la economía después del Estado de Alarma, se irán deshaciendo de manera progresiva.
Respecto a las medidas adoptadas por las administraciones, me gustaría resaltar el trabajo que está realizando la Comunidad de Madrid en materia de reducción de impuestos y ayudas a pymes y autónomos.
La actual situación ha puesto “patas arriba” casi todo. ¿Cómo cree que será el textil español y europeo, después de esta tormenta perfecta?
De la situación actual se pueden sacar varias reflexiones. Si tomamos como ejemplo el sector de la agricultura y la situación de escasez vivida con las mascarillas, se ve claramente.
España ha apostado por la agricultura como producción estratégica y ésta es la razón por la que, durante esta crisis, a los españoles no nos ha faltado comida. Por otro lado, nos hemos visto afectados por una escasez de mascarillas y otros equipamientos, por la falta de previsión y la deslocalización de su producción.
Las repercusiones van a depender de la duración del Estado de Alarma. Lo primordial en estos momentos, lo que sí podemos sacar en claro, es la importancia de mantener parte de la actividad productiva dentro de nuestras fronteras. La crisis actual debe servirnos de referencia y aprendizaje sobre la necesidad de tener un tejido industrial fuerte, y ubicado dentro del país, sobre el que apoyarnos.
Parte del problema que ha tenido nuestro sector en cuanto abastecimiento, stock, ha sido consecuencia de la deslocalización. España y Europa deben plantearse mantener parte de su producción dentro de los países por una cuestión estratégica, además de empleo y riqueza, tal y como se ha demostrado.
A qué teme más en la etapa post: ¿crisis de los mercados de exportación? ¿crisis del mercado doméstico? ¿a una oleada de impagos? ¿a encontrar una nueva generación de proveedores? ¿a la inutilidad – demostrada con suficiencia- de toda la clase política?
Es posible que veamos significativamente afectadas las exportaciones nacionales, la recuperación será lenta y va a depender de cómo se desarrolle el coronavirus en los distintos países, a la hora de la exportación, y las situaciones particulares que esto genere.
Por otra parte, la oleada de impagos va a ser casi imposible de evitar y se le suma el cierre de clientes y empresas. Por esta razón, se deberá ayudar a los clientes a financiar las mercancías, de esta primavera-verano, para poder digerir el pago.
Calculamos, para este año, y en el mejor de los escenarios, una caída de en torno al 20-30% del cómputo total del año. Y esperamos para el 2021, a través de una actitud volcada en el consumo nacional, cierto crecimiento.
Como somos un sector de temporada, la recuperación es lenta. La Primavera-Verano 2020 la hemos perdido, también parte del Otoño-Invierno; será a partir de la Primavera-Verano 2021 cuando empecemos a ver esa recuperación.
Algunos expertos señalan que la crisis actual va a ser corta. ¿Comparte usted esta opinión o, por el contrario, prevé una salida lenta y difícil hacia la recuperación?
Vivimos momentos muy inciertos, por lo que, insisto, la recuperación será más lenta o rápida en función del tiempo que dure el Estado de Alarma. Evidentemente, cuánto más permanezcamos en esta situación, más sufrirá la economía, pero volver a la actividad debe hacerse de manera segura. Cada semana de confinamiento es la perdida de casi 1 punto del PIB.
Es vital trabajar conjuntamente para superar esta crisis sanitaria lo antes posible. Aquí entran en juego la realización de test masivos, el uso de mascarillas y otros materiales de protección, así como cumplir con las medidas de higiene pertinentes. Por nuestra parte, el sector de la moda está comprometido con la producción de los equipamientos necesarios.
Si conseguimos ir saliendo entre el 26 de abril y el 11 de mayo, por supuesto contando con ayudas fiscales y dando liquidez a las empresas, podremos recuperarnos antes. Considero que, por su parte, la población española está muy concienciada, tiene la voluntad de ayudar y volcarse con el consumo doméstico, lo cual será nuestra mejor arma para recuperarnos.
Los posibles escenarios que se nos plantean son: una recuperación en V, la cual va siendo más difícil a medida que pasa el tiempo; en U, que en estos momentos es la más probable; o en L, lo que significaría una larga travesía por el desierto con una lenta recuperación.
¿Cree que las empresas van a recuperar a posteriori toda la plantilla o con esta excusa se procederá a una reducción, más o menos encubierta, de su personal?
No sé qué situaciones se derivarán de esto, pero, indudablemente, para poder recuperarnos todos y con la mayor celeridad, lo deseable sería recuperar el empleo y en todos los sectores. Más aún si queremos apostar por el consumo nacional.
Para concluir, láncenos, si lo ve factible, un mensaje optimista.
Ante todo, no debemos perder la ilusión y la fuerza para luchar. Con el esfuerzo de todos, podemos a superar esta crisis sanitaria y la económica.
En lo económico, las herramientas para salir adelante son la flexibilidad laboral, reducir y dar facilidades fiscales y, sobre todo, procurar que la liquidez llegue a todas las empresas. También se deberá estimular el consumo doméstico ya que uno de los puntos fuertes de la economía española, el sector turístico, va a tardar más tiempo en recuperarse.
Con estas medidas es como lo conseguiremos y aseguraremos nuestro futuro y el del país.
5Manuel Martos
Director general de Nextil
Director general de Nextil
En su opinión, ¿es una buena medida la puesta en marcha de los ERTE? ¿Son la solución más eficaz para responder a la crisis actual?
Cada empresa tiene su propia dinámica y no siempre un ERTE es la mejor solución, aunque es una herramienta más para poder mantener la actividad a futuro.
Respecto a las medidas de las administraciones, no tenemos noticia de medidas de apoyo a nivel local ni autonómico.
Respecto a las medidas estatales, esperamos que los planes de apoyo a las empresas, presentados en el Consejo de Ministros, se materialicen pronto para poder superar cuanto antes esta crisis.
La actual situación ha puesto “patas arriba” casi todo. ¿Cómo cree que será el textil español y europeo, después de esta tormenta perfecta?
Lamentablemente cada vez somos menos en el tejido empresarial textil y fabril en España, y en Europa se centra en unos pocos países como Portugal o Italia, donde cada vez más se enfocan al sector Premium y Lujo.
No hablamos de las grandes empresas del Retail, líderes en su sector, sino de los productores y equipos de diseño que hacen posible que estas empresas tengan éxito.
Hace tiempo que dieron un vuelco hacia China y Turquía, y no es de esperar un cambio significativo a partir de ahora. Sobre todo por la presión cada vez más creciente de estas empresas en mejorar márgenes a través de las cadenas de suministro.
A qué teme más en la etapa post: ¿crisis de los mercados de exportación? ¿crisis del mercado doméstico? ¿a una oleada de impagos? ¿a encontrar una nueva generación de proveedores? ¿a la inutilidad – demostrada con suficiencia- de toda la clase política?
Parece evidente que esta crisis será fundamentalmente de consumo.
Esto va a tensionar a muchas de las empresas que conforman la cadena de suministro textil, produciendo situaciones dolorosas de restructuración e impagos, pero lo cierto es que ya hemos pasado por varias de estas crisis, como la entrada de China en la OMC en 2000 o la crisis del 2007.
El sector se ha ido haciendo cada vez más fuerte y está capacitado para resolver estas situaciones.
Algunos expertos señalan que la crisis actual va a ser corta. ¿Comparte usted esta opinión o, por el contrario, prevé una salida lenta y difícil hacia la recuperación?
No creo que sea corta, no al menos en el textil. Aunque el comercio on-line ha crecido significativamente durante este encierro, no alcanza todavía cifras que puedan sustituir al comercio a pie de calle. Y éste va a verse dañado por normas de distanciamiento y reducción de aforo que seguro afectarán al consumo hasta que se supere esta pandemia.
A eso hay que añadirle que el consumo se verá afectado durante meses por la pérdida de puestos de trabajo.
¿Cree que las empresas van a recuperar a posteriori toda la plantilla o con esta excusa se procederá a una reducción, más o menos encubierta, de su personal?
Ninguna empresa quiere reducir su plantilla.
Los empresarios, autónomos y empresas crean el 75% de los puestos de trabajo en España, el resto los crea el sector público.
Siempre es una decisión difícil de tomar reducir la plantilla y representa un proceso doloroso que a nadie le gusta o busca hacer.
El tejido empresarial español está profesionalizado y estoy convencido de que aquellas empresas que tengan que tomar esa decisión lo harán porque no les queda otra vía para salvar su actividad a futuro.
Para concluir, láncenos, si lo ve factible, un mensaje optimista.
España es la tercera economía de la zona Euro, tenemos una estructura empresarial muy robusta, grandes profesionales y trabajadores altamente cualificados.
Hemos pasado por otras crisis, en el sector textil tanto o más duras que ésta, estoy convencido de que sabremos recuperar y superar las cifras anteriores a la crisis, tanto en términos de empleo como de resultados empresariales.
6José Royo
Director de Ventas de Tejidos Royo
Director de Ventas de Tejidos Royo
En su opinión, ¿es una buena medida la puesta en marcha de los ERTE? ¿Son la solución más eficaz para responder a la crisis actual?
Nadie sabe cuál es la solución más eficaz. Nos encontramos ante una situación que ninguno de los que estamos hoy en los negocios hemos afrontado anteriormente. Si los políticos del mundo no se ponen de acuerdo en cómo atacar la pandemia, ¿cómo voy a saber yo si es la mejor medida? Mira que tienen consejeros todos los políticos, ¿¿cómo es posible que ningún país haga lo mismo?? Cada uno con medidas diferentes y luego todos arrepintiéndose. América no se ha tomado en serio el virus y lo va a pagar de forma muy dura. No olvidemos que lo importante son las vidas humanas, no el dinero.
Los Ertes son una medida. La primera. El problema es que hacen falta muchas más. No hay que retrasar pagos, hay que cancelarlos. Ya veremos qué hacemos cuando esto acabe, pero el gobierno no puede machacar al sector privado. ¿O es que pensamos que todo el conglomerado público puede vivir sin la empresa privada? Tengo que ser políticamente correcto, o me puedo arrepentir. Pero si hubieran dejado las medidas económicas a empresarios, todo hubiera sido mucho más fluido y realista. Creo que no son conscientes del daño empresarial/económico que el virus ha hecho y cómo va a ser la “nueva” realidad.
La actual situación ha puesto “patas arriba” casi todo. ¿Cómo cree que será el textil español y europeo, después de esta tormenta perfecta?
Ni idea, si lo supiera, ya estaría trabajando en el cambio de modelo. Tenemos una realidad, todo el comercio textil, no sanitario, está parado. Cero por ciento de actividad.
¿Qué va a pasar con los stocks de temporada pasada? ¿Rebajas espectaculares para vaciar/saldar? ¿Qué va a pasar con la temporada de invierno? La logística de compras lejanas está altamente dañada, muchos países productores no saben qué hacer con los trabajadores. ¿Esto quiere decir que el invierno se va a tener que fabricar en cercanía? Nos ayudaría mucho al sector textil europeo. Pero no a los precios asiáticos, nuestros costes no son los mismos.
El consumidor, ¿se ha mentalizado que todo no debe ser precio y que tenemos derecho a fabricar todos? ¿Qué es más lógico pagar 10€ más por una prenda, que comprar todas las semanas baratijas?
La tormenta perfecta…. espero que el consumidor se dé cuenta que hay que cambiar los hábitos de compra. Si uno no mira la etiqueta de “made in”. que luego no pida trabajar y salarios justos. Somos nosotros mismos los que nos cortamos las posibilidades de crecer y crear en nuestro país.
A qué teme más en la etapa post: ¿crisis de los mercados de exportación? ¿crisis del mercado doméstico? ¿a una oleada de impagos? ¿a encontrar una nueva generación de proveedores? ¿a la inutilidad – demostrada con suficiencia- de toda la clase política?
Podríamos escribir un libro con esta pregunta. Repito, debo ser políticamente correcto, no está el mundo como para enemistarse con los políticos. Bastante tenemos cada uno con sacar la empresa adelante.
El futuro viene dado por el mercado real y objetivo de cada empresa. Si tu mercado es el europeo, dependerá de cuando salga cada país. Y más o menos vamos en sintonía.
El motor como siempre es Alemania, en el momento en que ellos abran, nosotros notaremos el empujón. Si tu mercado es el americano, van demasiado atrás en la curva de contagios (por no mencionar el problema de la sanidad pública, inexistente) Creo que hasta agosto/septiembre, no será un mercado abierto completamente.
Si tu mercado es el asiático, se han empezado a mover, pero al igual que en Europa y Estados Unidos, a diferentes velocidades (hoy se cierra Japón por 3/4 semanas). En un mes, ¿Asía tendrá todas las tiendas abiertas? Si no es así, tampoco la recuperación vendrá por allí. China no es un país de venta para nosotros, nos ayudará poco.
Por lo cual, la respuesta no es un só o no… Depende de donde tengas centrado el negocio, la recuperación será más rápida o más lenta. No confío en la recuperación mundial antes de 6 meses.
El problema no es la contención del virus, ya sabemos lo que tenemos que hacer; El problema es cómo vamos a volver, cuándo y !con qué cambios!
Si una de las soluciones es llenar a la mitad los restaurante, los cines, los eventos deportivos, etc, podremos confiar en una recuperación de la economía al 50%, creando una crisis de consumo BESTIAL!!
Los políticos han demostrado que no son eficientes, estoy convencido que no lo hacen con mala fe, pero es que tenemos intereses diferentes… Nosotros luchamos cada día por nuestra empresa, que vende en todo el mundo, el político lucha por su cliente, que es el votante de cada país, no tiene visión general de los problemas reales a los que nos enfrentamos. Mientras el político tenga “el cliente”, nunca serán objetivos.
Algunos expertos señalan que la crisis actual va a ser corta. ¿Comparte usted esta opinión o, por el contrario, prevé una salida lenta y difícil hacia la recuperación?
Como acabo de mencionar en la pregunta anterior, dependerá de la velocidad de recuperación de las economías europea, americana, asiática… No creo en la economía de un país, eso es mirarse el ombligo. Yo soy pesimista, no veo una recuperación corta y rápida. A no ser que tengamos una vacuna.
Si tenemos vacuna, hablaremos de está pandemia como algo que nos pasó, no como una crisis mundial. Si no hay vacuna, veo que nos encontraremos en la misma situación el otoño que viene…
En la situación actual, y con los políticos mundiales que tenemos, nos va a costar mucho. Son ineficientes por naturaleza.
¿Cree que las empresas van a recuperar a posteriori toda la plantilla o con esta excusa se procederá a una reducción, más o menos encubierta, de su personal?
!Nuestro objetivo es que volvamos todos! Ya hemos tomado medidas muy dolorosas durante el último año. Por supuesto, siempre se puede recortar más, pero nuestra idea, y hasta hace un mes lo estábamos consiguiendo, era crecer en países fuera de Europa y aumentar producción. Vamos a ver cómo abre el mundo y si podemos seguir creando puestos de trabajo.
Por mucho que les duela a algunos, los empresarios queremos crear y crecer. El dinero por sí sólo no significa nada.
Cada día que nos levantamos, tenemos el objetivo de facturar y crecer más y la única forma de hacerlo es con personas. Lo que no queremos es a los vagos, lastran el crecimiento y bienestar de la organización.
Déjame que te ponga una frase de Winston Churchill: “Muchos miran al empresario como el lobo que hay que abatir; otros lo miran como la vaca que hay que ordeñar; pero muy pocos lo miran como el caballo que tira del carro”.
No somos el enemigo, somos parte de la solución.
Para concluir, láncenos, si lo ve factible, un mensaje optimista.
Por supuesto, yo en mi casa no me quedo (fuera del estado de emergencia, claro). Tejidos Royo lleva luchando desde 1903, la cuarta generación tenemos el objetivo de dejar la empresa preparada para luchar otros 100 años.
No va a ser fácil, pero tampoco lo fueron las guerras anteriores y aquí seguimos.
Las empresas salen con el esfuerzo de su equipo, las personas; y en Tejidos Royo tenemos el mejor grupo de personas que podríamos pedir. Por lo cual, saldremos adelante.
7Tatiana Suárez
Directora corporativa de Talento y Cultura de Adolfo Domínguez
Directora corporativa de Talento y Cultura de Adolfo Domínguez
En su opinión, ¿es una buena medida la puesta en marcha de los ERTE? ¿Son la solución más eficaz para responder a la crisis actual?
Los Erte son una solución temporal que protege a empleados temporalmente inhábiles. Pero no son una solución para las empresas.
Cada empresa tendrá que reorganizarse para afrontar un nuevo escenario. Hasta ahora, ni desde las autoridades europeas, ni españolas, tenemos a disposición medidas que realmente vayan a paliar la drástica caída de ventas del sector textil/moda.
Cada sector tendrá sus particularidades que creo que deben ser definidas en reuniones con los gobiernos para que sus planes de apoyo sean eficaces y cuesten lo menos posible a los contribuyentes.
La actual situación ha puesto “patas arriba” casi todo. ¿Cómo cree que será el textil español y europeo, después de esta tormenta perfecta?
Todo está por ver. Dentro de esta crisis del coronavirus, para el sector textil/moda español se requiere un pacto entre el sector y las autoridades, poniendo como principal objetivo la regeneración de las empresas y del empleo.
Es posible que veamos un proceso gradual de acercamiento de la producción y, aunque inicialmente parece que todo indica a una intensa actividad promocional tras la reapertura, el actual calendario de saldos y rebajas puede verse alterado.
A qué teme más en la etapa post: ¿crisis de los mercados de exportación? ¿crisis del mercado doméstico? ¿a una oleada de impagos? ¿a encontrar una nueva generación de proveedores? ¿a la inutilidad – demostrada con suficiencia- de toda la clase política?
Lo peor para una empresa es un cambio drástico de condiciones como el que todos estamos afrontando. Y la incertidumbre, claro.
Si vamos a un proceso de desglobalización o no; si vamos a un plan potente de inversiones publicas para regenerar la economía o no…
Nosotros estamos trabajando con varios escenarios y, en función de la evolución aplicaremos el plan A, el B, el C o el que sea más adecuado para volver a salir al mercado.
Hasta que exista un remedio científico contra el coronavirus, que no lo hay aún, no podrá existir una solución mágica para reenfocar el planeta.
Algunos expertos señalan que la crisis actual va a ser corta. ¿Comparte usted esta opinión o, por el contrario, prevé una salida lenta y difícil hacia la recuperación?
Insisto, hasta que exista un remedio científico, todo son conjeturas. Hemos de adecuarnos a un nuevo mercado, a una situación que nadie sabe ni cuándo ni cómo concluirá.
¿Cree que las empresas van a recuperar a posteriori toda la plantilla o con esta excusa se procederá a una reducción, más o menos encubierta, de su personal?
Va a depender de las certidumbres que podamos planificar. Una empresa no es como una olimpiada, que la pasas de 2020 a 2021 y ya está.
No, una empresa que no vende en 2020 no puede hibernar todos sus gastos (empleos, alquileres, producciones…). Esto tendrá consecuencias. Es mejor asumirlo y planificarlo.
Para concluir, láncenos, si lo ve factible, un mensaje optimista.
Después del invierno siempre viene la primavera. Este año a la moda, a los clientes, el coronavirus les ha robado la primavera.
Creo que, cuando exista remedio científico, el estallido económico será muy positivo y será interesante trabajar en un sector que suele marcar tendencias y encontrar lo mejor de la gente para vestirla.
Por otra parte, creo que esto nos ayudará a reenfocar nuestro diálogo con el planeta, quizá empecemos a valorar aquello que no tuvimos al alcance durante un tiempo y es lo único que perdura.