La industria de la moda está cada vez más ligada al fracking, según el informe Fracked Fashion de Stand.earth. Más del 57% de los textiles globales están fabricados con poliéster, material que depende de combustibles fósiles extraídos de la Cuenca Pérmica de Texas.
El informe de Stand.earth expone que marcas globales como Inditex y Lululemon usan fibras sintéticas en su cadena de suministro derivadas del fracking (Fracturación Hidráulica).
La Cuenca Pérmica, una de las mayores áreas de extracción de etano mediante fracking, se ha convertido en una fuente crítica para la producción de poliéster, que actualmente domina la industria textil.
Según los datos del informe, Inditex es uno de los mayores compradores de estas fibras, mientras que el 72% de las prendas de Lululemon están compuestas por materiales derivados de combustibles fósiles.
Proyecciones preocupantes
Para 2030, se estima que las fibras sintéticas representarán el 73% de la producción global de textiles. Este incremento intensificará los impactos ambientales, los riesgos para la salud y la generación de residuos. Sin embargo, solo 57 marcas han implementado políticas para reducir el uso de estas fibras.
El informe critica la tendencia a utilizar poliéster reciclado de botellas plásticas como una solución, argumentando que esta práctica no elimina la dependencia de los combustibles fósiles y no es sostenible a largo plazo.
Recomendaciones para el cambio
Stand.earth propone que las marcas de moda reduzcan en al menos un 50% su uso de materiales derivados de combustibles fósiles para 2030. Entre sus recomendaciones destacan:
- Establecer políticas de transparencia que rastreen las cadenas de suministro hasta la materia prima.
- Invertir en reciclaje textil de alta calidad en lugar de utilizar poliéster reciclado de botellas plásticas.
Acciones regulatorias necesarias
El informe también sugiere medidas legislativas como el New York Fashion Act o la normativa europea Ecodesign for Sustainable Products Regulation, diseñadas para abordar los impactos de los materiales sintéticos. Estas iniciativas podrían incluir impuestos sobre plásticos vírgenes y requisitos de divulgación de datos en las cadenas de suministro.